LA TRAGEDIA

Io, che d’alti sospir vaga e di pianti,
spars’hor di doglia, hor di minacce il volto,
fei negli ampi teatri al popol folto
scolorir di pietà volti e sembianti,

non sangue sparso d’innocenti vene,
non ciglia spente di tiranno insano,
spettacolo infelice al guardo umano,
canto su meste e lagrimose scene.

Lungi via, lungi pur da’ regii tetti,
simolacri funesti, ombre d’affanni:
ecco i mesti coturni e i foschi panni
cangio, e desto ne i cor più dolci affetti.

Hor s’avverrà che le cangiate forme
non senza alto stupor la terra ammiri,
tal ch’ogni alma gentil ch’Apollo inspiri
del mio novo cammin calpesti l’orme,

vostro, regina, fi a cotanto alloro,
qual forse anco non colse Atene o Roma,
fregio non vil su l’onorata chioma,
fronda febea fra due corone d’oro.

Tal per voi torno, e con sereno aspetto
ne’ reali imenei m’adorno anch’io,
e su corde piu liete il canto mio
tempro, al nobile cor dolce diletto.

TRAGEDIA

Yo, ávida de profundos suspiros y lágrimas,
mi rostro marcado por penas y amenazas,
yo, que he causado las caras de las multitudes
reunidas en grandes teatros palidecer de piedad,

ahora no cantaré de la sangre derramada de inocentes venas,
ni de ojos cegados por un tirano desquiciado;
sino de algo muy lamentable para el hombre,
de escenas de gran tristeza y lágrimas.

Huyan lejos de las habitaciones reales,
ustedes, tristes espíritus, sombras abatidas;
mirad, dejo de lado zapatos tristes y velos ensombrecidos:
ahora despierto afectos más dulces en los corazones.

Si sucediera que, no sin asombro,
la tierra admirase estas formas cambiadas,
y que cada noble alma a quien ha inspirado Apolo
siguiera las huellas de mi nuevo camino,

Entonces, oh, reina, cuánto laurel será vuestro,
más de lo que jamás ha sido reunido en Atenas o Roma;
una diadema apropiada para vuestra ennoblecida cabeza,
una guirnalda apolínea entre dos coronas de oro.

Así regreso con usted, y con aspecto sereno,
me prepararé para una boda real.
Afinaré mi canción a cuerdas más alegres,
a los dulces placeres de un corazón noble.

Traducción: Gabriela Villa Walls